Sinsentidencias

2011, empiezas en sábado, me caes bien. Hoy, tras levantarme a las 13:45, me he quitado 2 kilos de legañas, me he vestido, he desayunado escuchando la marcha radetzky en la 1, he echo la cama y me he quedado mirando por la ventana abierta 20 min mientras se aireaba la habitación.

Tantos pensamientos cruzaban mi mente...pensando qué me deparará este año, qué alegrías y qué desgracias, imaginando como será mi vida a partir de septiembre de este año, dónde estaré, qué estaré haciendo...un mar de dudas, como el viajero que sabe que se acerca un cúmulo de bifurcaciones y comprueba el mapa para no equivocarse de desvío en la autopista de la vida.

Imaginándome también cómo sería mi vida una vez hecha, dónde estaré viviendo, en qué tipo de casa, con quién ( o quienes, si hay renacuaj@s), con qué coche, y qué rutinas tendría, incluso si habría sucumbido a la tiranía del café o habría resistido. Y empecé a soñar, a inventarme historias, de cómo sería la humanidad en ese tiempo ( paso de describirlo, ya escribí un ensayo sobre eso para el insti) e imaginándome cómo sería mi dia a dia, despertando en la cama un fin de semana por los rayos de sol que entraran por la cortina, mirar a la izquierda y ver la silueta de mi mujer a contraluz, levantarme, darle un beso en la frente y preparar el desayuno para todos, porque íbamos a pasar la mañana en el parque...

De repente, se me posó una mosquita en la nariz, que espanté de un soplido, y que me sirvió para dejar de soñar despierto ( o medio despierto), cogí el ipod, puse mi canción favorita y me puse a escribir esto.