Sí, esos ratos que nada los caracteriza para que te acuerdes de ellos, absolutamente nada, a lo mejor chateas, estudias, cagas...esto es un homenaje a aquellos segundos que consideramos una "pérdida de tiempo", pero son igual de necesarios.
¿Qué haríamos sin ese rato de mirar por la ventana con la mirada perdida en el horizonte?¿ sin esos momentos de paro cerebral mirando fijamente a cualquier cosa con los ojos abiertos? pensadlo bien, no le dais importancia, pero sirven para desconectarse de todo o para concentrarse en algo que tenemos rondándonos la mente, imaginaos un día al completo siempre haciendo algo, sin parar, estando concentrados en lo que hacemos hasta cuando descansamos, ¿verdaderamente descansaríamos?.
No, queridos lectores, eso no es descansar, el descanso mental se produce cuando no se usa la mente, y es en esos momentos zombis cuando la dejamos parar por un breve intervalo de tiempo, incluso cuando dormimos, la mente trabaja en reparar el cuerpo y en ponerte pelis en tu cabeza, que solemos llamar sueños.
Por esos ratos en los que nos pueden gritar nuestro nombre o estallar una bomba nuclear que no nos daríamos cuenta, incluso con algunos golpecitos dificilmente nos podrán sacar de ese limbo mental, por esos momentos que le concedes al cerebro para que se desconecte estes haciendo lo que estes haciendo, por esos instantes en los que te puedes sentar en un sillón mental mientras las voces de tu interior lo hablan todo sin ti o se callan, según tengan el día, por todos esos momentos, la mente es maravillosa, trabaja mucho, descansa poco, es poco útil pero sirve para muchas cosas, te emparanoia o te despeja toda duda, te hace viajar o te hunde en tu propia miseria, por nuestra querida mente, alzo un vaso de agua del grifo y pido un brindis.
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Tiempo cualquiera
viernes, 3 de diciembre de 2010
Publicado por Sifte en 18:06 | Enviar por correo electrónico Escribe un blog Compartir en X Compartir con Facebook |
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